Aquel día Paty y yo nos vimos como siempre, en el café que está cerca de su casa. Ordenamos un pastelillo, ella de arándanos y yo un muffin de chocolate. Mark: Te amo Patricia: Ok mi amor Mark: Quiero cogerte muy rico, bb Paty: Siii amor Mark: Meterme entre tus nalgas Mark: Mira, mi vida: Mark: Así chupo tu culito. Me encantas!!! Mark: Mi mano tocó tímidamente tu rodilla y subió un poco a tu muslo, separando un poco tu pierna para abrirla ... Mark: ... tu piel era suave y tersa, muy fina. No protestaste, sino que me guiñaste un ojo permitiéndome seguir con mi escarceo ... Mark: Subí un poco más hasta llegar a tu faldita, metí la mano dentro de ella, seguí subiendo y comprobé, para más asombro, que ibas ¡sin braguitas ni tanga! ¡con tu panocha al aire! ... Mark: